miércoles, 23 de julio de 2008


-Me quedaría aquí para siempre -musita el muchacho mientras observa el transcurrir de la tarde con una cerveza "el gallo" entre sus manos-. ¿Por qué no?, este lugar resulta tan apacible...

-Tan apacible como aquel de donde vienes. Es cuestión de los ojos con los que miras, no lo olvides- reflexiona ella en alta voz.

-Sí, pero a la que te das cuenta... la vida se pasa -insiste el chico sin convicción- y... si puedo traerme un puñado de gente hasta aquí, yo me quedo y tú también.

-De cuerdo -asiente ella-, yo también. Y ahora vamos a dar un paseo.

-Venga- dice tras despachar con reverencia el último trago.

4 comentarios:

Rosa Zafra dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Rosa Zafra dijo...

hola, ya veo que os lo tomais con tranquilidad,asimilando, cada palabra, cada sitio, se nota que estais impregnados de esa armonia, incompatible con el hacer cotidiano.rosa

Unknown dijo...

Yoohoo! Creo que ya estoy aqui - gracias a profesora de blogging! Bueno no voy a perder mas tiempo e ideas por si a caso...

Unknown dijo...

Recuerdos de Mino, que está cumpliendo con su tarea de Gato Guardian.